sábado, 16 de abril de 2011

Siempre hay una primera vez

Recién iniciada en la bloguería espero descargar energía, municiones, costumbres, venires y porvenires de alguien totalmente normal. Sin censura y casi sin escrúpulos intentaré descartar mi vida diaria en este blog. Tal vez esto pase algunas veces a ser una especie de realismo mágico o simplemente un buen espacio de ciencia ficción, uno nunca sabe si no viene tal vez algún plato volador a buscarme o quieran convertirme en vampiro. Todo puede pasar…y de lo que no tengo ninguna duda es que a mi todo me puede pasar. Empezaré por contarles que hoy, un día que empezó con un madrugón importante y siguió con una típica limpieza general de sábado, se convirtió en una vertiginosa carrera hacía el exilio de mi hogar (no me fui del todo, ya volví). Tan complicado como salir de mi casa… Me bañé, me cambié y cuando estaba saliendo empezaron a caer: mi vecina a invitarme al cumpleaños de su niñito(5 años), ahhh una experiencia única!! Montón de pendejos gritando, vasos sucios, chizitos por todos lados, tortas mordidas… demás esta decir y fingí un dolor de cabeza y le dije no gracias .. cuando cumpla 18 voy! ; y llegó mi suegra, genial, justo lo que necesitaba para alegrarme el sábado y cuando ya estaba logrando que se aburra y chau .. zas! Llega mi cuñada con los tres chiquitos y chau salida, chau limpieza general.
Y salí, a las tres cuadras empezó a llover y ahora estoy haciendo el blog.